Qué difícil me fue mirar House hoy. Realmente difícil.
No es que no me haya gustado el capítulo, sino que me resultaron difíciles ciertos momentos y estar acompañdo por alguien especial. El tema del episodio fue un chico sordo que empieza a sentir ruidos en su cabeza.
Ese alguien especial que me acompañaba era una de mis hermanas. Ella desde chica tiene problemas en los oídos.
En partes hablan del implante coclear. Algo que ella se podría realizar, pero que no quiere. Sufrió mucho con las operaciones de chica. Ni siquiera va al médico de Buenos Aires que la revisaba cada tanto.
El 99% de la gente no se da cuenta de su problema. Sabe leer los labios muy bien, y lo sé. Cuando se le cuenta a alguien, se queda helado. Ni siquiera sus profesoras de idiomas se dieron cuenta, y ella incluso logró tomar los acentos.
Fue difícil que hablaran de problemas en los oídos y estar con ella. Sé que no le gusta hablar de eso, pero me haría tan feliz que fuera al médico a controlarse y se operara. Pero no quiere, y ella decide.
Noi, esseri finiti, personificazioni di uno spirito infinito, siamo nati per avere insieme gioie e dolori; e si potrebbe quasi dire che i migliori di noi raggiungono la gioia attraverso la sofferenza. Ludwig van Beethoven
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